A 5 años del primer “Ni Una Menos” este 3 de junio, en todo el país “millones de mujeres trabajadoras, adolescentes y niñas denuncian estar padeciendo “hambre, miseria, crisis habitacional, precariedad laboral y violencia doméstica de forma brutal”.
“Esta realidad no la creó la cuarentena, pero se profundizó como efecto inmediato de la decisión política gubernamental de no poner fin a la sangría de recursos del Estado para el pago de la deuda externa ni controlar a empleadores y patronales que siguen despidiendo en medio de la crisis mientras los premian con subsidios”, destacaron distintas militantes del Frente de Izquierda.
“El objetivo de acuerdo con los bonistas y el salvataje a los capitalistas se contrapone con todos los derechos de las mujeres trabajadoras, de las disidencias, de las mujeres de las comunidades originarias: el derecho al agua, a los alimentos, a la vivienda, a la educación bilingüe, a la salud, al aborto legal, siguen siendo derechos por conquistar”, resaltaron en un comunicado.
En Salta, llamaron la atención sobre el femicidio de Rosa Sulca como “resultado de una zona liberada”, y pidieron la renuncia del ministro Pulleiro y la cúpula policial.
También centraron la atención sobre la falta de adhesión en la Provincia “al nuevo protocolo de Interrupción Legal del Embarazo” (ILE), y la cantidad de abusos sexuales infantiles que se dieron en el contexto de la cuarentena en Salta.