Lejos de las expresiones que tuvieron con la Resolución 125/08 en la primera gestión de Cristina Kirchner, con cortes de ruta y protestas en los centros de la ciudad, el sector de los grandes productores del campo se mostró pasivo ante el gobierno de Mauricio Macri que en muchas ocasiones los había beneficiado. Esta vez a través de un comunicado decidieron expresar su repudio por los decretos 767/18 y 793/18.
Según explican las entidades del campo, “el primero elimina o disminuye sustancialmente los reintegros a las exportaciones cuyo espíritu es devolver los impuestos internos que se tributan en el proceso productivo, y el segundo restablece los derechos de exportación. Ambos impuestos impactan en el resultado productivo de la producción primaria”.
“Compartimos profundamente el objetivo de “déficit cero”, pero no compartimos el camino tomado. No vemos voluntad de ningún gobierno, ni Nacional, Provincial o Municipal de bajar el gasto de la política.
¡Subir impuestos no es el camino!”, manifestaron indignados.
Sin mencionar absolutamente nada del vaciamiento del Estado que cada vez contiene menos a las familias de pequeña y mediana producción, los grandes productores salteños pidieron a la dirigencia política” responsabilidad en la administración de los recursos públicos, no solamente logrando el equilibrio fiscal, sino bajando el gasto improductivo”.
Nada dice tampoco el comunicado de los grandes beneficios con un dólar que ha llegado a escalar en su momento a los $44 y que es sostenido por todas las familias trabajadoras en el consumo interno.